Aunque estés tan cerca no te veo. Te siento entre
el murmullo de esa música lejana que me alcanza sin necesidad de apurarse. Te intuyo en tu presencia de lino y cedrón.
Suave y mentolada, tu esencia dice presente, me llama, me busca. Nos adoramos.
No como a un Dios. Como a nosotros.
sábado, 18 de agosto de 2018
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