El pulso de las calles esta señalado por la aceleración del tiempo y existencias que sólo sobreviven. La miseria camina y me rodea. Pasa delante mio, sigue de largo, pero queda. Y al quedar, duele, lástima. Los sentidos no logran ser impermeables a la miseria humana. No podrían serlo. Sólo el cinismo de la meritocracia, puede servir de paraguas protector ante tanta agua pútrida y estancada.
domingo, 10 de marzo de 2019
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Una exagerada simplificación. Pero, por ello, no menos explicativa. Los gobiernos como los de Milei llegan al poder y se mantienen, expresa...
-
Tal vez, solo Casualidad. De hecho, ¿qué otra cosa podría ser, sino? Viendo televisión, detuvimos la marcha frenética de nuestro control rem...
-
Navego, floto sobre la vida que rodea. Descanso viendo la realidad, como si fuera una película que proyectan y cruzo el negativo sin nadie q...
-
https://contraeditorial.com/las-nueve-semanas-y-media-de-milei/
No hay comentarios:
Publicar un comentario